La exposición de Kara Walker en el MACA suma más de 44.000 personas y bate récords

La muestra de la artista norteamericana, que incluye 44 obras donadas y cedidas por Jenkins y Romero, se puede ver hasta el 6 de septiembre

Imagen de visitantes a la exposición de Kara Walker

Alicante, 21 de agosto de 2025. La exposición Kara Walker. Burning Village que se puede ver en el Museo de Arte Contemporáneo de Alicante MACA ha recibido la visita de 44.296 personas desde que se inauguró el pasado 28 de febrero, lo que la convierte en una de las de mayor éxito de la historia del museo. La muestra ha contado además con un importante programa de actividades complementarias, que han permitido acercar temas tan relevantes en la obra de Kara Walker como son la esclavitud, el racismo o el feminismo. Estas actividades han contado con 902 participantes. El MACA continúa en una línea ascendente, con una oferta expositiva y de actividades de calidad, que le valió el año pasado superar por primera vez los 100.000 visitantes anuales.

La conservadora del MACA, Rosa Castells, ha señalado que "Kara Walker, tal y como hemos comentado en numerosas ocasiones, es una figura destacada del arte contemporáneo y mostrar su obra e indagar en su universo es una tarea necesaria". "Su obra no es fácil ni complaciente y aun así el público responde ante una obra que le interpela directamente, de forma incómoda poniendo de manifiesto que el arte contemporáneo cuestiona los problemas de su tiempo y en él se reconoce el visitante. Esta exposición ha permitido al museo convertirse en espacio de encuentro y construir espacios de reflexión y crítica”, ha explicado Castells.

Como colofón a la exposición, el museo prepara una fiesta de clausura que tendrá lugar el sábado 6 de septiembre, cuyos detalles se conocerán próximamente. A continuación la exposición viajará al IVAM para mostrarse en Valencia del 25 de septiembre al 22 de febrero de 2026.

La exposición

La muestra reúne los numerosos trabajos de Kara Walker presentes en la colección Michael Jenkins y Javier Romero del MACA. Comisariada por Rosa Castells, está formada por 44 piezas que recorren parte de su trayectoria y constituyen uno de los conjuntos de obra más completos de la artista existente en instituciones europeas. Muestra dibujos, grabados, esculturas, libros de artista y uno de sus vídeos más recientes. De las piezas, un total de 31 obras están donadas en propiedad al MACA en 2021 y 13 piezas depositadas en 2024 para esta exposición que han viajado desde Nueva York.

La artista

Kara Walker (Stockton, California, 1969). Creció en Atlanta desde los trece años. Se licenció en el Atlanta College of Art en 1991 y obtuvo un máster en la Rhode Island School of Design en 1994. Ha recibido numerosos premios, entre ellos el John D. and Catherine T. MacArthur Foundation Fellowship Award (1997) y el United States Artists Eileen Harris Norton Fellowship (2008). Ingresó en la Academia Americana de las Artes y las Letras en 2012 y fue nombrada académica honoraria de la Real Academia de Arte de Londres en 2019.

Su obra aborda temas de violencia, identidad, raza y sexualidad en el contexto de la herida psicológica todavía vigente causada por el trágico legado de la esclavitud, presentando una visión crítica del pasado histórico y examinando los estereotipos raciales y de género en nuestra sociedad actual.

Conocida por su trabajo de siluetas recortadas en papel, inspiradas en la tradición histórica de los retratos de sombras victorianos, en el teatro de sombras o en las linternas mágicas, Walker utiliza, en trabajos de gran belleza formal, el lenguaje de la sátira y los arquetipos para revelar las contradicciones del concepto que una nación tiene de sí misma, al tiempo que arroja una mirada subversiva muy lúcida sobre las alusiones histórico-artísticas que influyen en sus obras, ha indicado Castells.

A través del dibujo, el grabado, la escultura, el vídeo y la instalación, la artista explora la representación de la noción de raza en el arte moderno y contemporáneo, así como la necesidad de establecer nuevas narrativas que desafíen la manera como miramos y entendemos la historia. Las imágenes en la obra de Walker, tomadas tanto del realismo histórico como del espacio fantástico de lo imaginado, seducen por su desgarro emocional, la fuerza intelectual que abrigan y su extraordinaria belleza visual, ha añadido la comisaria de la muestra.